miércoles, 4 de agosto de 2010

Apenas una imagen borrosa al fondo. Una ventana con rejas.
Cuando estaba lúcido, miraba hacia afuera, como pájaro preso de su propia libertad y encerrado por haberse portado mal.
Miraba con anhelo, con nostalgia. ¡Cuánto daba yo por salir afuera! Y ahora que estoy afuera me pregunto si a veces no seguiré viviendo de la misma forma, divisando a unos metros la ventana enrejada. Viviendo encerrado en el mundo exterior.

Lo que sé, y ahora lo sé, es que quiero que muchas cosas sean distintas de lo que han sido al menos los últimos 2 años. No soporto tanta infelicidad. Tanta vida allá afuera resplandeciendo, tantas oportunidades.. Yo no puedo seguir acá dentro. Es momento de salir de a poco. Sin apuros, tengo todo el tiempo del mundo. Tengo todo mi tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario